Pasear no es solo un acto de ejercicio físico, es una actitud.
Mientras dejo que mis pies me lleven donde ellos quieren, mis sentidos se impregnan de múltiples sensaciones.
Cuando paseo por mi ciudad no puedo dejar de mirar en todas direcciones pues siempre descubro algo nuevo: un detalle arquitectónico, un elemento curioso, un comercio original, una obra de arte, una referencia a la historia…
Todo lo que descubra de cada rincón de Barcelona será motivo para compartirlo con mis lectores.
